Es de muy mal agrado ver la cara de los turistas que llegan en cruceros a Las Palmas de Gran Canaria y lo primero que ven es el pésimo estado en el que se encuentran los alrededores del parque Santa Catalina, así como para el propio ciudadano.

Los suelos muy sucios, al igual que parterres con hierros oxidados de hace mucho  tiempo. Palmeras abandonadas  de las cuales un día si y otro también se les caen grandes ramas con el peligro que lo haga encima de alguien. Papeleras de basura siempre saturadas... etc.

El abandono del edificio  Miller

Pero de todo este abandono resalta el lamentable aspecto que presenta el edificio Miller, al cual los turistas le sacan fotografías que no representan nada positivo a la ciudad. Sus paredes parcheadas con la negligencia por el paso del tiempo sin cuidados le dan un aspecto al edificio de una ciudad abandonada; con estructuras metálicas a ras del suelo oxidadas y peligrosas para las muchas personas que por esas aceras circulan a diario.

Señor alcalde de Las palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, no sólo de metro-guagua vive la ciudad,la cual aún ni existe y se están invirtiendo mucho dinero, más de lo que se piensa, en ella.