En la calle Nicolás Estévanez N° 30 (esquina con calle Dr. Miguel Rosas), se encuentra Gatuccino, el primer cat café de Las Palmas de Gran Canaria,  inaugurado recientemente por Alan y Carla, gracias  a sus dos pasiones: los animales y el café. En el local campan a sus anchas los cuatro felinos que buscan  adopción (Vainilla, Graciela, Sudoku y California) y que reclaman mimos por los clientes que acuden a visitarles, bajo dulces melodías de Jazz o música relajante.

La última incorporación "minina" al cat café ha sido la de California, que desde un principio se adaptó muy bien a sus hermanos  Gatuccinos, Vainilla, Graciela y Sudoku, sobreviviente al terrible incendio de la cumbre de Gran Canaria.

La expectación por la inauguración de esta cafetería con unos inquilinos tan especiales ha sido tanta que algunas personas han llegado a Gran Canaria desde otras islas solamente para disfrutar de su compañía, además de haber recibido un  cordial trato y muy buen servicio por parte de sus propietarios.

Como dice el dicho: "Es de bien nacidos ser agradecidos", y así lo han demostrado Alan y Carla que no quiere que pasemos el alto lo muy agradecidos que están con la organización sin ánimos de lucro, Carol y Cía por permitir a la cafetería ser casa de acogida de los cuatros gatitos; así  como a la tienda Carmen y sus Mascotas (calle Bernardo de La Torre, 81) por ceder juguetes y accesorios para hacer más acogedora la estancia de los animalitos en el local.

Graciela, entre juegos y mimos / Foto: José Luis Sandoval

Para la buena estancia de los gatos en Gatuccino existen unas normas en el local. Les pongo el enlace de su página en Facebook para que ustedes mismos las vean.

Sudoku pendiente de unos nuevos clientes que entraban / Foto: José Luis Sandoval