Los vecinos de la carretera del Barranquillo en Barranco Merdejo, Pino Santo Alto, ya pueden acceder a sus viviendas con sus vehículos tras la finalización de la obra que ha permitido la reposición del muro y otras actuaciones que evitarán la erosión en el cauce del barranco y facilitar el drenaje superficial de la pista. De esta forma se reduce el impacto de las escorrentías que provocaron la caída del muro y los problemas que ha padecido el vecindario durante más de un año.  

El coste total de esta obra ha sido de unos 74.000 euros y ha sido financiada por el Cabildo de Gran Canaria a través de la Mancomunidad de Medianías. Además, se ha mejorado la seguridad de la vía, con elementos de como una barrera bionda, pintada en color mimetizado con el entorno. Además se ha repavimentado más de 750 metros cuadrados de viario público, lo que ha mejorado la adherencia del firme y el paso al tráfico rodado de la zona.  

Asimismo, se ha revestido los márgenes de barranco en trazado muro, con piedra colocada a forma de tratamiento de taludes existentes, a fin de evitar la erosión en los márgenes donde se produjeron los depósitos del derrubio. En total se ha reconstruido más de 130 metros cuadrados de muro de hormigón, piedra cara vista con una longitud de 13 metros lineales por 1,5 metros de ancho y se ha desescombrado el cauce del barranquillo.  

La caída del muro de hormigón se produjo por escorrentías originadas por las lluvias en una vía con un drenaje inadecuado para encauzar las aguas pluviales de la vía. El impacto de los aguaceros, así como elementos vegetales muy enraizados (higueras y otras especies), provocó la caída del muro de contención de la pista, por lo que se imposibilitó el paso rodado al núcleo de las viviendas de los vecinos y a los propietarios de fincas colindantes.  

Con la ejecución de esta obra se ha mejorado la vía y el drenaje superficial de la misma, siendo esta medida, la mejor opción para evitar nuevos derrumbes por estos motivos. También se evitará el retoñe de elementos vegetales (higueras y arbustos, además de malas hierbas), que producen con sus raíces deterioros importantes en los muros de piedra seca existentes en las fincas colindantes y del camino. Y, por otra parte, se ha disminuido y se ha canalizado las escorrentías y filtraciones de agua que tanto daño hacen en este tipo de muros.