Quien conozca el lugar donde arribó la patera con 21 inmigrantes en pleno corazón del turismo en Gran Canaria, la zona de nudistas de playa de Maspalomas, sabrá que el acceso a vehículos en la zona es prácticamente imposible, sobre todo para ambulancias y transportes de las fuerzas de seguridad del estado, de ahí que el retraso de horas en atender a los inmigrantes fuera lo lógico a no ser de que el ejercito, ataviados con trajes especiales, desplegase una patrulla de helicópteros para recoger a estas personas. Estos inmigrantes comenzaron a ser atendidos en la playa y zonas de la cruz Roja en el que el camión que utiliza el servicio de limpieza de playas para mover enseres, recoger arena y trasladar al personal que limpia la playa (nunca he escuchado a nadie indignado por trasladar a estos trabajadores en dicho transporte municipal) les dejara, no es un camión de basura. ¿Qué hubiera pasado si les hubieran sacado por las dunas caminando?

Ahora queda la guerra política de que "la culpa fue tuya", no "más tuya", etc. Quedan los escritos en los medios de comunicación, esperando a ver lo que redactan, según les diga la voz de su amo. Quedan los montajes en la redes sociales, muchos para desprestigiar a Gran Canaria, y se sabe de donde vienen. Quedan tantas cosas ahora por ver...

Habrá que poner un servicio de autobuses especiales 4x4 que aunque nunca se utilicen estén ahí por si acaso.

Por cierto, que no cunda el pánico,  los inmigrantes  llevaban más de un año en Marruecos esperando para embarcar hacia Canarias, donde no hay riesgo de ébola.